CORRIDA DE TOROS EN LUCENA

ENTRETENIDO FESTEJO QUE SATISFIZO AL PÚBLICO

 

 Plaza: Los Donceles. Alrededor de media entrada en tarde muy agradable de temperatura.
Ganado: toros 1º, 5º y 6º de Pereda y 2º,3º y 4º de La Dehesilla. Todos de la misma casa ganadera. De diferente presentación y  juego variado. El mejor el quinto, merecedor de una vuelta al ruedo, por su incansable manera de embestir y nobleza.
Manuel Díaz “El Cordobés”: Estocada y cuatro descabellos (ovación con saludos) y estocada contundente (oreja con fuerte petición de la segunda).
Antonio Ferreras: Estocada (dos orejas) y estocada (dos orejas).
Víctor Abad: Pinchazo, estocada y descabello (oreja) y dos pinchazos, media estocada y siete descabellos (ovación con saludos).
Incidencias: Ferreras salió de la plaza a hombros. El segundo toro fue devuelto a los corrales por problemas de visión en el ojo derecho.

Entretenida corrida de toros la lidiada hoy domingo de Resurrección en Lucena. De no haber sido por la espada todos los toreros hubieran salido por la puerta grande a hombros. Y es que el ganado, en líneas generales, ha colaborado en que el público se lo pasase muy bien.
Sin embargo el lote más áspero ha correspondido a Manuel Díaz “El Cordobés” quien, una vez  más, ha demostrado su profesionalidad, honradez y entrega. Por eso el público y el aficionado le reconocen su valía. Todo lo que hace lo ejecuta con pasión vaciándose en cada actuación. Esta tarde, con  dos toros  a contra estilo, no ha dudado en dejarse el alma. Incluso, al malasombra cuarto, le hizo el salto de la rana, cabezazos incluidos, en un alarde de querer agradar y a petición del respetable. A su primero lo toreó muy bien de capote y muleta y a su segundo le sacó todo lo que el animal tenía dentro. Eso sí, exponiendo mucho. Por eso está donde está.
Antonio Ferreras, que entró en el cartel en sustitución de El Fandi que como saben sufrió la rotura de una costilla en el Festival del Cáncer de Córdoba, no quedó a la zaga en cuanto a entrega y vergüenza torera. Con el capote, con las banderillas y con la muleta formó un “gazpacho” en la plaza a sus dos toros. Muy bueno, sobre todo, el par al quiebro al quinto, un animal que se rebozaba en cada pase y al que el extremeño exprimió al máximo con pases de todas las marcas, y al que la presidencia no concedió una merecida vuelta al ruedo por su magnífico juego en el ruedo.
Víctor Abad, que no toreaba en público desde la tarde de su alternativa en Septiembre de 2011, no desmereció en absoluto frente a sus compañeros de cartel. Parecía que estos se lo comerían, y nada de eso. No acusó su bisoñez en ningún momento. A sus dos enemigos los toreo muy requetebién con el capote saliendo desde tablas al centro del ruedo. Luego con la muleta, al primero, le realizó una faena muy completa con pases por ambas manos entre olés del público. Muletazos largos con sentido de la estética, que no tuvieron la rúbrica necesaria para poner en sus manos los dos  preciados trofeos. En el sexto, un animal mas rebrincado, Víctor estuvo más que digno, sin arrugarse y sobre todo dando la cara ante un enemigo complicado. De haberlo matado bien hubiera tocado pelo nuevamente.
En resumen, un festejo muy entretenido a los que gusta asistir y no se aburre nadie.- L.R.G.